Bella del Señor es una de
las cumbres novelísticas de nuestro siglo, obra de Albert Cohen, un autor
inclasificable y desconcertante que ha sido comparado con Shakespeare, Proust,
Musil, Céline y Charlie Chaplin. Situada en Ginebra y en Francia, en 1936, en
una época en que el antisemitismo alcanza en Alemania su paroxismo, Bella del
Señor relata, con lirismo romántico unido a su ironía feroz, la relación
exasperada entre Solal, judío, alto funcionario de la Sociedad de las Naciones,
y Ariane, la aristócrata aria casada con un subordinado de Solal, desde su
encuentro hasta la agonía final, pasando por la conquista, la pasión y la
implacable degradación de los sentimientos. Para combatir la saciedad, los
amantes recurren a todos los medios: celos retrospectivos, humillaciones
morales y todas las recetas eróticas: este libro de amor es también un retrato
de los horrores de la carne. Tanto por el análisis de los celos como por el
relato de la seducción o por su pesimismo radical, casi metafísico, respecto al
mito del amor puro, Albert Cohen, en esta búsqueda del Absoluto a través del
amor, nos ha dejado páginas que pertenecen ya a la leyenda y que durante largo
tiempo continuarán forjando la sensibilidad de lectores y lectoras.